martes, 30 de abril de 2013

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Se dice se comenta.

Conozco todos vuestros secretos.

Se ha hablado mucho ya sobre profesorado y alumnado, sobre personal administrativo y planes de estudio, pero aun no se han tratado los temas que realmente importan, los gordos, los que nadie se atreve a denunciar.

Para comenzar, me parece indignante que yo vaya a las cinco de la tarde a la cafetería, pida una pizza para compartir con mi amigo y LA COCINA ESTÉ CERRADA.
Ni merendar en condiciones puede uno. Por no hablar de la leyenda del estudiante de audiovisuales que pidió una viena Y NO SE HABÍAN GASTADO.

En otro orden de cosas, la UMA debería de incluir en el precio de la matricula el alquiler de una bicicleta o una barca a pedales que nos ayudase a desplazarnos del zulo a la facultad y viceversa las mil veces que tenemos que hacerlo al día debido al horario y distribución de clases tan acertada.

Y hablando de matriculas:
Quiero mi beca, quiero mi beca, quiero mi beca, quiero mi beca, quiero mi beca, quiero mi beca, quiero mi beca, quiero mi beca, quiero mi beca, quiero mi beca, quiero mi beca, quiero mi beca, quiero mi beca, quiero mi beca, quiero mi beca, quiero mi beca, quiero mi beca, quiero mi beca…

Voy a seguir mandando solicitudes de beca sea o no el plazo, exista o no la beca, tengáis o no el dinero.

Bueno, no me quería enfadar, pero me gustan mucho las pizzas entre horas.

Mira, yo entiendo que llevar un colegio tan grande no es fácil, se me han ocurrido algunas sugerencias interesantes para mejorar la universidad: Un torneo de mus anual en la cafetería, una hora de juego libre a la semana, una piscina en la parte de atrás de la facultad para las horas muertas con su consiguiente “día oficial del bikini”, un campeonato de baloncesto entre alumnos y profesores, un baile de graduación, otro “día oficial del bikini”, que todos los profesores lleven gorros graciosos o que se prohíba mencionar a “Umberto Eco”

Creo que todo esto ayudaría a crecer como universidad y ya que no vamos a salir los mejores preparados del país (no solo por el contenido de algunas asignaturas, sino por nosotros mismos, que aplicamos la ley del mínimo esfuerzo, yo el primero) si salgamos siendo todos compañeros, que también es una parte importante de la universidad.

Siempre podemos montar una empresa entre todos, mejor que nada.

- Morris Dickens in cabin -

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